Diferencia entre bronquitis, enfisema y EPOC
Te explicamos la relación entre estas enfermedades respiratorias, qué sintomas produce y cómo se pueden tratar
La bronquitis crónica, el enfisema y la EPOC impiden que la respiración fluya adecuadamente, llegando a repercutir en la vida de la persona afectada. Aunque tienen características distintas, sí que coinciden en algunos puntos. Te explicamos qué son, cuáles son sus síntomas y cómo se relacionan.
¿Qué es la EPOC y cuáles son sus síntomas?
Con este acrónimo se conoce a la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica, que es un trastorno en la respiración cuya presencia se sitúa en alrededor del 9% de la población, afectando en mayor medida a los fumadores. De hecho, se estima que la mitad de ellos puede desarrollar esta enfermedad.
La doctora Lorena Comeche Casanova, jefa asociada en Neumología del Hospital Universitario Quirónsalud Madrid, nos apunta que "la EPOC es una enfermedad respiratoria crónica en la que los bronquios se obstruyen y el pulmón se destruye".
Entre las causas de este problema respiratorio, están:
- Tabaquismo activo o pasivo
- Utilización frecuente de carbón y leña en casas que no están ventiladas correctamente
- Contaminación
Síntomas de la EPOC
- Tos
- Constantes mocos o expectoración
- Catarros con frecuencia
- Sienten que no tienen suficiente aire
Diagnóstico específico con la espirometría
Para confirmar la presencia de la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica se recomienda el uso de la espirometría, que es una prueba indolora aconsejada especialmente a personas que fuman, o que ya no lo hacen, con más de 40 años, con tos, exceso de mocos y catarros constantes, falta de aliento…
Cabe añadir que mediante esta técnica de diagnóstico se descarta la presencia de EPOC, pero no de otro tipo de daño pulmonar relacionado con el tabaco, como puede ser el enfisema, el cáncer de pulmón… Para ello es preciso realizar otras pruebas especializadas, según las pautas que el equipo de Neumología indique en la consulta.
¿Cómo reaccionan los pulmones frente al tabaco?
Los bronquios, que son las vías que transportan el oxígeno a los pulmones, se protegen de manera natural produciendo moco que permite expulsar las sustancias que acceden a su interior. En caso de que se trate de humo contaminado por tabaco, esta reacción está acompañada por tos.
"Por eso, uno de los primeros síntomas de los fumadores es la producción de moco, expectoración y tos de forma habitual, que es lo que se denomina bronquitis crónica", matiza nuestra neumóloga, quien añade que "esto reduce el calibre de los bronquios, y al tener que respirar por unos tubos mucho más estrechos, el esfuerzo que se necesita para movilizar el aire es mucho mayor, lo que produce dificultad respiratoria".
Por todo ello, los especialistas no se cansan de repetir la importancia de eliminar por completo el tabaco de nuestras vidas y eliminar así todos sus efectos nocivos.
Bronquitis crónica: qué es y sus síntomas
Es una enfermedad respiratoria causada por la inflamación de los bronquios, lo que a su vez implica un aumento constante de mocos y tos. La bronquitis crónica es en sí misma una de las causas de la EPOC, por lo que es aconsejable realizar una espirometría que confirme o descarte la presencia de esta última.
Enfisema y sus consecuencias en el pulmón
Al igual que la bronquitis crónica, se trata de un trastorno respiratorio cuya principal causa suele ser el tabaquismo. Concretamente, el enfisema implica daño en los sacos que contienen el aire dentro de los pulmones, los alveolos. Sus paredes internas se debilitan hasta llegar a romperse, lo que hace que, en vez de existir múltiples espacios de aire pequeños, cada vez haya más espacios grandes, reduciendo la superficie de los pulmones y, consecuentemente, disminuyendo la cantidad de oxígeno que llega a la sangre. La sensación es como si faltara el aliento.
Junto con la bronquitis crónica, es uno de los trastornos de la EPOC.
Relación entre bronquitis crónica, enfisema y EPOC
El punto común es la dificultad para respirar, y su origen mayoritario es el humo del tabaco, ya sea cigarrillos normales o de liar, que son igualmente nocivos. En menor medida, también se localizan algunos casos producidos por tabaquismo pasivo o inhalación de otros humos contaminados.
Además, otro nexo de unión entre estos trastornos del pulmón es que la EPOC engloba a la bronquitis crónica y el enfisema, que en cualquier caso se traduce en un deterioro progresivo de la capacidad respiratoria.
Al hilo de esto, nuestra neumóloga concluye que "lo habitual es que los fumadores desarrollen primero bronquitis crónica y enfisema, y cuando ésta sea de determinada magnitud, aparezca la EPOC".
El tratamiento comienza dejando de fumar, y no hay mejor momento para empezar que hoy mismo.
© 2024 Quirónsalud - Todos los derechos reservados