10 mitos sobre la enfermedad pulmonar obstructiva

Al igual que otras patologías comunes, la enfermedad pulmonar obstructiva crónica o EPOC también está rodeada de falsas creencias. Esto lleva a menudo a aplazar el diagnóstico, restar importancia a los síntomas o no incorporar medidas preventivas frente a uno de sus principales factores de riesgo como el tabaquismo.

En este artículo reunimos los 10 mitos más populares relacionados con la EPOC y te contamos cuál es la realidad de las personas que viven con esta enfermedad.

Mito 1. La EPOC es una enfermedad poco común

¡Falso! Esta patología causante de tos crónica, cansancio y otros problemas respiratorios es muy frecuente. En la actualidad, se estima que hay más de 300 millones de afectados a nivel mundial.

Además, se sitúa como la cuarta causa de fallecimiento, provocando alrededor de 3 millones de muertes al año, situándose por detrás de las enfermedades cardiovasculares, cerebrovasculares e infecciosas.

Sin embargo, se trata de una enfermedad muy infradiagnosticada. Al respecto, el doctor Luis Manuel Entrenas Costa, jefe del servicio de Neumología del Hospital Quirónsalud Córdoba, señala que "el 75% de los casos no está diagnosticado, siendo más común esta circunstancia en mujeres que en hombres".

Mito 2. Esta enfermedad pulmonar solo afecta a fumadores, ¿sí o no?

¡No! Aunque el tabaquismo es el principal responsable de esta enfermedad, también puede desarrollarse en no fumadores. De hecho, el 30% de las personas con EPOC no han sido fumadoras.

Existen otros factores de riesgo, por ejemplo, inhalar partículas de polvo o sustancias químicas, la contaminación o un trastorno en el desarrollo pulmonar. Sobre este último, el doctor José María Echave-Sustaeta María-Tomé, jefe de la Unidad de Neumología del Centro médico-quirúrgico Olympia y de los hospitales universitarios La Luz, Quirónsalud Madrid y Ruber Juan Bravo, y el Hospital Quirónsalud Valle del Henares, destaca que "hasta en un 50% de los casos, un factor favorecedor es una alteración del desarrollo pulmonar durante la infancia y la adolescencia, por lo que la generalización de la espirometría desde edades tempranas de la vida permitiría identificar personas con mayor riesgo de desarrollar EPOC".

Mito 3. Si tienes EPOC, no puedes hacer ejercicio, ¿es cierto?

No, es falso. Las personas con esta enfermedad pulmonar no solo pueden realizar actividad física, sino que también es muy recomendable. Una de las razones es que necesitan más energía para poder respirar, por lo que es muy importante que se mantengan activos.

La doctora Marta Entrenas Castillo, especialista en de Neumología del Hospital Quirónsalud Córdoba, asegura que el ejercicio físico es el tratamiento no farmacológico más importante para los pacientes con EPOC.

Concretamente, la actividad física favorece las funciones del corazón y de los pulmones, lo que tiene un efecto muy positivo en la realización de las tareas cotidianas de las personas con EPOC. Para iniciarse se puede optar por caminar o subir escaleras y, poco a poco, aumentar la intensidad.

Mito 4. La enfermedad pulmonar obstructiva tiene un difícil diagnóstico

No. En realidad, para detectar la EPOC se utiliza la espirometría, que es una prueba diagnóstica que no causa dolor y tampoco es invasiva. Además, su uso es muy habitual en la consulta de Neumología.

Por lo general, el diagnóstico se complementa con la historia clínica del paciente y una exploración física. En ocasiones, se pueden indicar otras pruebas como una analítica, una radiografía de tórax o una pulsioximetría, entre otras.

Por lo tanto, ante posibles síntomas de esta patología pulmonar, lo más conveniente es contactar con los especialistas. El doctor Echave-Sustaeta indica que "es muy importante la sospecha clínica, ya que el 75% de los pacientes con EPOC no han sido diagnosticados. Desconocen que padecen la enfermedad y, por tanto, no reciben tratamiento".

Mito 5. Tras el diagnóstico de EPOC, ¿es bueno seguir fumando?

¡Falso! Una de las medidas para convivir con esta enfermedad es dejar este hábito dañino y, además, evitar ser fumador pasivo, por lo que tampoco se debe permitir que otras personas fumen delante de una persona con EPOC.

Hay que tener en cuenta que el tabaco es el principal causante. La doctora Lorena Comeche Casanova, jefa asociada de Neumología del Hospital Universitario Quirónsalud Madrid, afirma que "dejar de fumar es la principal medida que se tiene que tomar en esta enfermedad, ya que influye directamente en el pronóstico".

Mito 6: Esta enfermedad afecta solo a los pulmones, ¿sí o no?

¡No! Esta patología provoca la obstrucción de los bronquios y el deterioro de los pulmones. Además, gran parte de las personas afectadas presentan enfermedades crónicas asociadas, que se relacionan con las mismas causas de la EPOC como tabaquismo, envejecimiento y sedentarismo.

10 mitos sobre la enfermedad pulmonar obstructiva

Por otro lado, el doctor Echave-Sustaeta añade que "la hiperinsuflación puede afectar a la función cardiaca y el intercambio gaseoso, y el proceso inflamatorio sistémico acompañante, puede iniciar o empeorar comorbilidades como la cardiopatía isquémica, la insuficiencia cardiaca, la osteoporosis, la disfunción muscular esquelética, la anemia, la diabetes y el síndrome metabólico".

Mito 7. Una enfermedad ni prevenible ni curable, ¿es cierto?

¡Mentira! La enfermedad pulmonar obstructiva crónica sí que se puede prevenir, pero, una vez desarrollada, no existe cura. Para prevenir la EPOC, la doctora Comeche recomienda evitar la inhalación del humo del tabaco y otras fuentes de humo ambiental que pueden originar la enfermedad.

A pesar de que no hay terapias para solucionarlo, existen terapias como el broncodilatador o la oxigenoterapia, así como una serie de hábitos que logran una mejor calidad de vida.

Mito 8. La EPOC no afecta a la calidad de vida, ¿verdad o mentira?

¡Mentira! Aparte de los síntomas respiratorios, esta enfermedad causa un impacto negativo en el día a día e incluso en la salud mental. Al principio los síntomas solo aparecen al realizar esfuerzos físicos, pero, en fases avanzadas, estos pueden desencadenarse en reposo o con pequeños esfuerzos.

Cabe destacar que existen pautas diarias para convivir mejor con esta enfermedad pulmonar como realizar compras pequeñas, mantenerse activo o comprar ropa fácil de poner y quitar. La doctora Comeche apunta que "es cuestión de conocer esas limitaciones y tomar medidas para manejarlas; eso mejorará los síntomas y la calidad de vida".

Mito 9. ¿Existen varios tipos de enfermedad pulmonar?

Sí. Para determinar de qué tipo se trata, es necesario conocer la historia clínica de cada caso y realizar un análisis de sangre y una espirometría. La doctora nos explica que, combinando esta información, "podemos establecer el tipo de EPOC, lo que ahora se llamaría fenotipo de la EPOC, y la gravedad". De esta manera, se puede determinar el tratamiento a seguir.

Mito 10. Solo los adultos de edad avanzada padecen EPOC.

No. Si bien es cierto que su prevalencia aumenta con la edad, siendo los más afectados los hombres de 70 a 79 años, según el último estudio español EPI-SCAN. Sin embargo, existen un 4% de casos en la franja de edad de los 40 a los 49, 7% de los 50 a los 59 y 14% de los 60 a los 69.

Cabe destacar que, aunque habitualmente se relaciona el origen de la EPOC con las edades avanzadas, esta enfermedad se puede producir por trastornos en el desarrollo en edades tempranas. En relación a esto, el doctor Echave-Sustaeta señala que "alrededor de un 7-10% de los adolescentes presentan niveles reducidos de función pulmonar y los adultos jóvenes con funciones pulmonares alteradas incrementan un riesgo de padecer otras enfermedades no respiratorias y muerte temprana".

Teniendo en cuenta esto, el doctor añade que se puede realizar una espirometría desde edades más jóvenes, "en la niñez y adolescencia para identificar a estos sujetos con funciones pulmonares alteradas y mayor riesgo de desarrollar EPOC. Con los resultados de esta prueba, peso del paciente y la capacidad de ejercicio, entre otros, se diagnostica la gravedad".