Juguetes en Navidad, ¿cómo evitar sustos?
Los niños de 0 a 3 años están expuestos a varios riesgos en el momento de jugar, ¡aprende a prevenirlos!
Los juguetes de Navidad, que tanta ilusión hacen a los más pequeños, pueden causar algún susto si no se toman ciertas precauciones. Por esta razón, es fundamental que las familias revisen con cuidado la carta a Papá Noel y los Reyes Magos antes de enviarla.
En ocasiones, los peques incluyen algunos juegos que no son los más indicados para su edad o que no cuentan con el sello de seguridad de la Unión Europea. La doctora Pilar Camacho Conde, jefa de Urgencias Pediátricas del Hospital Materno-Infantil Quirónsalud Sevilla, nos advierte que "desde una pieza pequeña que forme parte de un juguete hasta un borde puntiagudo son peligros a los que se enfrentan los niños".
En este artículo te ofrecemos las claves para jugar seguro estas navidades y te ayudamos a elegir juguetes tan divertidos como educativos.
Cómo evitar riesgos con los juguetes de los niños
Acertar con los juguetes de Navidad no es tarea fácil para Papá Noel y los Reyes Magos. Y es que, además de conocer los gustos de los más pequeños, también deben comprobar que sean seguros y no supongan riesgos para la salud como el atragantamiento.
Para que tu hijo juegue sin peligro, es aconsejable seguir las siguientes recomendaciones:
- Elige juguetes marcados con etiqueta CE. Este distintivo asegura que el producto cumple con las especificaciones de seguridad establecidas en la Unión Europea. Además, los juguetes con la marca CE han pasado las pruebas necesarias antes de venderse en las tiendas.
- Evita productos con bordes puntiagudos o que contengan piezas pequeñas. En este sentido, la doctora hace hincapié en que "es importante que no haya a su alcance nada que quepa en su boca, ya que puede producir un atragantamiento".
- Selecciona juegos indicados para la edad de tu hijo. La especialista añade que, además de ser adecuado para su edad, debemos tener en cuenta los gustos del menor.
- Comprueba que el juguete está en buenas condiciones antes de que lo use el menor. La doctora avisa de que "es importante revisarlo porque un juguete roto puede ser peligroso, tener una arista cortante, o que la tapa de las pilas cierre correctamente".
- Evita mezclar los juguetes de los hermanos mayores con los de los pequeños. Si en casa conviven niños de diferentes edades, es conveniente apartar los juguetes de unos y de otros. En este caso, la doctora aconseja sensibilizar a los más mayores para que separen los suyos y no los dejen al alcance de los más pequeños.
- Vigila cómo juegan los niños de menos de 6 años. La especialista señala que los juegos deben ser presenciados por un adulto, ya que de esta manera "evitaremos accidentes, y es una buena forma de compartir tiempo con nuestros hijos".
- Avisa a los Reyes Magos de que no es necesario comprar muchos regalos. Es una realidad que los niños se lo pasan mejor abriendo cajas y envoltorios que jugando después con lo que contienen. Por este motivo, Raquel Calero Domínguez, especialista en Psicología Clínica del Hospital Quirónsalud Infanta Luisa, nos recuerda que "los niños no necesitan juguetes para jugar", añadiendo que "es fundamental que regalemos una cantidad prudente, puesto que el exceso provoca en los niños falta de interés".
Atragantamiento con juguetes, ¿cómo actuar?
Si observamos que el menor se está atragantando con alguna pieza, lo más conveniente es ayudarle a que la expulse. La especialista en Urgencias Pediátricas aconseja "no extraer el cuerpo extraño a menos que sea realmente factible porque podemos conseguir el efecto contrario e introducirlo más".
Aunque sea una situación muy complicada, es esencial no ponerse nervioso, tal como indica la doctora: "en esos momentos hay que mantener la calma para realizar correctamente las maniobras adecuadas y trasladarlo a un centro sanitario".
Juguetes educativos de 0 a 3 años
Además de ser seguros y divertidos, pueden ayudar a que los pequeños aprendan y trabajen ciertas habilidades. Al respecto, la doctora Calero afirma que "el juego y los juguetes cumplen un papel fundamental en la dinámica del aprendizaje temprano y son esenciales para el desarrollo equilibrado de la personalidad infantil y su maduración".
Aquí te damos las claves para elegir juguetes más educativos según la edad del menor.
Primeros 6 meses
Los juguetes de los 0 a los 6 meses no deben ser duros y tampoco difíciles de agarrar. Su finalidad debe ser estimular la vista, la audición y el tacto.
Por otro lado, es importante que los bebés puedan trabajar el agarre de objetos y la coordinación entre la mano y la boca. Un ejemplo perfecto de todo ello son los sonajeros en varias texturas.
De 6 a 12 meses, ¿qué juguete es el ideal?
Si tiene materiales que se pueden manipular o construir, será el favorito de los niños de menos de un año. Esta clase de juguetes ayudan a ser más creativos, a trabajar la atención y a fomentar las habilidades manipulativas.
Hay que tener en cuenta que a esta edad empiezan a gatear, sentarse, desplazarse e incluso controlar su cuerpo. También les gusta construir y desmontar.
Niños de 1 año, ¿qué necesitan?
A esta edad podemos continuar fomentando la construcción. En concreto, la doctora Calero nos aconseja potenciar el movimiento, seguir favoreciendo las habilidades de construcción y también la coordinación óculo-manual, capacidad de atención e interacción causa-efecto.
Menores de 2 a 3 años
¿Notas que tu hijo intenta imitar situaciones de la vida cotidiana? Es algo normal en esta franja de edad. Por esta razón, los juguetes como muñecos, cocinas o doctores están indicados, ya que contribuyen a la creatividad de los pequeños y a sus ganas de construir.
Otro objetivo de los juguetes de los 2 a 3 años es fomentar las habilidades cognitivas. En este sentido, la psicóloga recomienda la resolución de puzles e imágenes, debido a que permiten trabajar el vocabulario y la autoestima.
Por último, es aconsejable favorecer la coordinación ojo-mano y la motricidad fina de los niños. La especialista añade que las motos y los patinetes son la mejor opción para desarrollar la parte motora de equilibrio y control corporal.
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