El pan, ¿un enemigo en la dieta?

Es habitual mantener una relación de amor-odio con el pan. Nos encanta tener "ese algo para mojar el plato" y, al mismo tiempo, nos asusta que conlleve un aumento de peso, puesto que siempre hemos escuchado que el pan engorda. Pero, ¿qué hay de cierto en esa afirmación?

Te ayudamos a quitarte el miedo por el pan, y que siga formando parte de tus platos.

Mito: el pan blanco engorda

El pan, ¿un enemigo en la dieta?

El pan blanco forma parte de los alimentos que eliminamos en seguida de la dieta, porque creemos que engorda, sin comprobar cuánto hay de cierto en ello. Al respecto, la doctora Sonia García Vizuete, jefa de servicio de Aparato Digestivo del Hospital Quirónsalud Sur, nos aclara que "el pan no es malo ni bueno, es un alimento sano, si se consume en las cantidades adecuadas, y es mejor el integral de verdad, hecho con trigo entero".

Así que decir que el pan engorda es una conclusión muy limitada, que puede llevarnos a sustituirlo por otros alimentos menos saludables y más calóricos. En este sentido, nuestra doctora nos revela que "cada vez comemos menos pan, y, sin embargo, tenemos más obesos". De hecho, el consumo de pan en España descendió el 2% en el año 2018, pero aumentó en 0,6% la ingesta de bollos y galletas y en 1,7% la de chocolate.

Sobre los bollos y las galletas, nuestra doctora nos avisa que "no hay galletas ni cereales para los niños que sean buenos ni sanos, todos son muy ricos en azúcar, y las galletas son una pasta de grasa, harina y azúcar, por lo que es mejor no tomarlas nunca".

El pan integral, más saludable y saciante

Este tipo de pan es rico en fibra insoluble, de la que aporta una cantidad tres veces superior a la del pan normal. Esto hace que el pan integral resulte más saciante, reduciendo así la sensación de hambre, y también ayude a prevenir el estreñimiento.

En cuanto a las calorías, contiene casi las mismas que el normal, así que tampoco es verdad eso de que el pan integral es menos calórico o que adelgaza.

Los beneficios del pan

Lo peor de suprimirlo totalmente de la dieta es que perdemos las propiedades que contiene:

• poca grasa
• energía
• efecto saciante
• vitaminas hidrosolubles del grupo B
• minerales, como el calcio, fósforo, magnesio y potasio

Sin olvidarnos de que el pan, y los cereales en general, son una importante fuente de hidratos de carbono para el organismo, que los necesita como nutrientes básicos para alimentar al cerebro. Desde Quirónprevención nos concretan que "el pan proporciona al organismo parte de la energía que éste necesita, particularmente para el cerebro y el sistema nervioso".

¿Existen los alimentos que engordan?

Es un error clasificar los alimentos entre los que sí engordan y los que no lo hacen, porque, como nos indican desde Quirónprevención, "ningún alimento, per se, tiene la capacidad de engordar o adelgazar".

El aumento de peso ocurre debido a que comemos más calorías de las requerimos o gastamos. "Este exceso de energía se produce por un consumo de alimentos en demasía, bien sea por cantidad o porque ingerimos alimentos con muchas calorías", nos explican nuestros especialistas.

A esto hay que añadir otros factores que influyen, por ejemplo:

• La estatura
• La edad
• El sexo
• El momento vital
• La actividad física y mental

Por lo tanto, la cantidad de calorías que debemos ingerir varía en cada persona. En este sentido, nuestros especialistas nos destacan que "comer 100 gramos de pan al día no es lo mismo para todos, dependerá de varios factores, y lo mismo sucede con el resto de los alimentos".

Eso sí, es importante saber que 100 gramos de pan normal aportan 230 calorías, por lo que en dietas de adelgazamiento puede ser recomendable controlar su ingesta. Sin embargo, existen otros alimentos bajos en calorías muy nutritivos, como las acelgas, con un aporte de 19 calorías por 100 gramos, que podremos incluir en mayor cantidad. "Todo depende de nuestro gasto energético, es decir, la práctica de ejercicio físico", nos concluyen nuestros profesionales.