La fibromialgia, un mal aún poco conocido que afecta a muchos
Te damos las claves para afrontar la enfermedad con ayuda del entorno familiar
Pese a ser una patología extendida, pocos conocen en qué consiste realmente y se tiende a confundir con el cansancio común, por lo que con frecuencia pasa desapercibida.
La doctora Susana Gerechter Fernández, jefe de servicio de Reumatología del Complejo hospitalario Ruber Juan Bravo, describe la fibromialgia como "una patología con alta prevalencia femenina, caracterizada por síntomas de dolor y cansancio, problemas de sueño, hiperalgesia generalizada (aumento anormal de la sensibilidad dolorosa), dolor persistente y alodinia (dolor que aparece con un estímulo que no debería causarlo), que suele provocar un gran deterioro en la calidad de vida de los que la padecen, resultando con frecuencia en una gran dificultad para desempeñar tareas habituales y, consecuentemente, pérdida laboral".
Por todo ello, es muy importante que la persona con fibromialgia cuente con el apoyo de su entorno familiar, lo que además resulta positivo para su calidad de vida. Te indicamos las pautas para que sea más fácil sobrellevar la enfermedad en familia.
7 síntomas de la fibromialgia
Aunque el dolor musculoesquelético generalizado es uno de los principales efectos de la fibromialgia, este síndrome también puede ocasionar otras manifestaciones clínicas, como:
- Rigidez muscular
- Fatiga y cansancio extremo
- Alteraciones del sueño
- Cambios en el estado de ánimo y ansiedad
- Problemas de memoria
- Dolores de cabeza
- Dificultades para concentrarse
¿Es fácil detectar y diagnosticar la fibromialgia?
Lamentablemente, no. A pesar de ser una de las enfermedades reumatológicas más frecuentes, su detección resulta compleja, ya que no existen criterios oficiales de diagnóstico descritos.
Otra dificultad añadida es que los resultados de algunas pruebas, como las radiografías o el análisis de sangre, son aparentemente normales, por lo que el médico especialista debe determinar la presencia de la fibromialgia valorando la sintomatología del paciente. En esta línea, se debe descartar la presencia de otras enfermedades que pudieran causar el dolor y también se debe realizar una completa exploración física en la que se pueda detectar la presencia, o no, de puntos sensibles dolorosos a la presión.
Tratamientos de la fibromialgia
Por el momento no se conoce una cura definitiva para la fibromialgia, pero sí existen tratamientos farmacológicos y no farmacológicos que están dirigidos a disminuir y aliviar la sensación de dolor y tratar los síntomas que acompañan a esta enfermedad reumática. El objetivo es mejorar la calidad de vida de las personas con fibromialgia.
La importancia de la familia y el entorno en el tratamiento de la fibromialgia
Un punto clave del tratamiento consiste en la comprensión y aceptación de la patología, tanto por parte del afectado como de su entorno, que permita afrontar con una actitud positiva la nueva situación y aceptar los cambios y las nuevas rutinas que puedan producirse en la dinámica familiar.
Igualmente, es vital entender cómo afecta la fibromialgia a la familia, para que la persona diagnosticada y su entorno puedan sobrellevar mejor la rutina diaria. En este sentido, resultan de gran importancia estos 4 puntos:
- Conocer qué es la fibromialgia. La información sobre la enfermedad, sus causas y sus consecuencias, ayuda a mejorar la calidad de vida, tanto a nivel físico como emocional, del paciente y de su familia.
- Cuidar el bienestar personal. Es importante que cada miembro de la familia cuide y priorice su bienestar personal en armonía.
- Exteriorizar cuáles son las necesidades y los límites. Las personas con fibromialgia deben exponer abiertamente sus necesidades y limitaciones, sin sentirse mal por ello, y no debe considerarse como una obligación o "carga" para su familia.
- Manifestar cómo se siente. El hecho de poder expresar los sentimientos y emociones tiene un efecto positivo en la persona afectada y su familia.
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