Cómo saber si mi hijo tiene depresión
Aprende a identificar las señales de la depresión en niños y adolescentes, así como las causas y la forma adecuada de actuar
La depresión provoca una tristeza persistente que puede llegar a incapacitar. En general, este trastorno mental se relaciona con la población adulta, pero lo cierto es que también afecta a los menores. De hecho, el psicólogo Ildefonso Muñoz Herrera, del Hospital Quirónsalud Campo de Gibraltar, indica que "entre un 4% y un 6% de niños y adolescentes podrían estar afectados por la depresión, según los últimos estudios de la Asociación Española de Pediatría".
Cabe tener en cuenta que la depresión infantil no se manifiesta exactamente igual que en los adultos. Al respecto, nuestro psicólogo añade que "es un problema que se confunde fácilmente debido a que refleja una sintomatología parcialmente distinta a la depresión en edad adulta".
¿Cómo se comportan los niños y adolescentes con este trastorno? ¿Cuáles son las causas? ¿Cómo deben actuar los padres? ¿Existe un mayor riesgo a causa de la pandemia? Conoce las respuestas.
Síntomas de la depresión en niños y adolescentes
Nuestro psicólogo nos indica que "no existen síntomas definidos o claros para el diagnóstico de la depresión, aunque sí podemos estar atentos a determinados comportamientos", entre los más frecuentes están:
- Dolores frecuentes de cabeza
- Molestias frecuentes de barriga
- Ganas de vomitar
- Inquietud
- Irritabilidad
- Micción nocturna, pese a que esa fase estaba superada
- Falta de concentración
- Agitación
- Fatiga
- Comportamientos negativistas y antisociales, por ejemplo, el niño rompe o quema objetos
Ante estos síntomas en los niños, es fundamental acudir a la consulta médica para descartar o confirmar que no se deben a episodios de depresión.
Causas de la depresión infantil
En el caso de los adultos, la depresión suele estar unida a:
- Rupturas, discusiones y otros problemas en la familia.
- Problemas en el trabajo, con los jefes o con los compañeros, entre otros.
- Retos diarios en la vida.
Pero, en el caso infantil, la depresión suele empezar a causa de:
- Problemas en la familia, por ejemplo, dramas, separación de los progenitores y antecedentes de depresión en la familia.
- Abusos, soledad y otras negligencias en el cuidado del menor.
- Fracaso escolar y bullying o acoso escolar, entre otros problemas en el colegio.
- Falta de autoestima impulsado por un estilo educativo negativo o por la conducta de los progenitores.
Qué debes hacer si tu hijo está deprimido
5 consejos para aplicar ante la sospecha de depresión infantil:
- No restes importancia a sus emociones. Evita creer que los problemas de niños y adolescentes, así como sus preocupaciones, son insignificantes frente a los de los adultos.
- Abandona para siempre la frase: "Tú lo que tienes que hacer es animarte". Recuerda que el cerebro carece de un botón para animarse, por lo tanto, si el menor no lo hace es porque no puede.
- Comunícate con tu hijo con tranquilidad y cariño, así ayudas a crear un ambiente de confianza. Es importante que se sienta respaldado, y que además pueda explicar todo lo que quiera, de modo que te permita guiarte sobre cuál es la causa del problema.
- Demuéstrale que le apoyas y que le acompañas durante todo este duro camino. Hazle saber que, juntos, saldrá del lugar en el que se encuentra.
- Contacta con un psicólogo o psiquiatra online o presencial, que son los profesionales especializados para tratar la depresión. De esta forma, ayudas a prevenir el empeoramiento del trastorno mental y también disminuyes los efectos secundarios. En la actualidad, además de las consultas presenciales, también existe la alternativa de optar por los tratamientos de psicología online, en concreto la Terapia para la depresión, que puede facilitar la asistencia desde casa o cualquier otro lugar.
El suicido, un grave problema también en los menores
Lamentablemente, según datos del Instituto Nacional de Estadística, se suicidan 10 personas al día en España, presentando una tasa mayor en los varones, con el 75,22%, frente un 24,78% en las mujeres.
Las cifras de suicidio infantil también son "preocupantes", tal como las califica nuestro doctor, quien además señala que "las tasas de suicidio crecieron del 1.9 al 2.6 por cada 100.000 y del 0.5 al 1.5 por cada 100.000, para las franjas de edad de 10 a 14 en niños, y de 5 a 14 años en niñas, respectivamente".
Efecto de la pandemia en la salud mental de la infancia
El doctor Rafael González de Caldas Marchal, pediatra del Hospital Quirónsalud Córdoba, ya nos avisó de que la pandemia de Covid-19 podía llevar a una ola de problemas de salud mental en adolescentes. Y, efectivamente, se ha comprobado en las consultas pediátricas un aumento de menores de 14 años con problemas, como:
- Depresión
- Ansiedad
- Síntomas obsesivos-compulsivos
- Somatizaciones
- Agravamiento de los problemas de conducta alimentaria
El periodo de confinamiento, que en un principio podía parecer hasta una aventura para los niños, realmente se convirtió en una fuente de problemas, y, de hecho, se han observado una serie de factores que han podido influirles psicológicamente, entre los que se encuentran:
- Falta de certidumbre
- Exceso de información
- Distancia social y familiar
- Falta de rutinas
- Excesivo uso de dispositivos electrónicos y redes sociales
- Ritmos poco regulares del sueño
- Alimentación poco saludable
- Problemas para compaginar el trabajo y el cuidado de la familia
- Miembros de la familia con la enfermedad del coronavirus
- Duelo por la muerte de seres queridos
Nuestro doctor nos explica que "todas estas circunstancias pueden actuar como desencadenantes del aumento de problemas mentales". Por eso es fundamental tratar de disminuir el estrés y prevenir que las complicaciones psicológicas se prolonguen y que se cronifiquen, "puesto que pueden dar lugar a psicopatologías más graves", como apunta nuestro doctor. Una de las mejores herramientas para evitar estos efectos negativos es realizar actividades de ocio en el exterior, sobre todo deportes que pueden practicar solos o en grupo, tal como nos propone el pediatra.