Vacuna para prevenir las infecciones de orina

Las infecciones de orina pueden resultar muy incómodas, y más cuando se repiten más de tres veces al año, creando la sensación de que esa infección no se quita o que se mantiene durante meses. Los últimos son casos de infección urinaria recurrente o de repetición, cuya prevención es posible mediante una vacuna personalizada. La doctora Leticia López Martín, especialista en Urología del Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz, matiza que "es una vacuna algo diferente a las que conocemos para otras enfermedades: no es una inyección. Su administración es un líquido oral que se pondrá debajo de la lengua".

Te explicamos cómo conseguirla y si es adecuada para ti.

Infecciones de orina: por qué se repiten

En general, las infecciones urinarias, como puede ser la cistitis, no causan problemas graves en la salud, pero sí afectan a la calidad de vida. Precisamente, nuestra especialista nos destaca que "constituyen una auténtica pesadilla para el bienestar de millones de mujeres, puesto que cualquier mujer, en algún momento de su vida, puede tener algún episodio, más o menos sintomático, generalmente lleno de malestar al orinar y orina con sangre, que les asusta mucho".

A esto se añade el riesgo de que la infección de orina se puede convertir en un problema recurrente o repetitivo durante varios meses. A ello hace referencia nuestra doctora: "Se estima que una de cada cuatro mujeres presenta infecciones de orina de repetición, es decir, más de dos episodios en seis meses o más de tres en un año."

Ilustración sobre las infecciones urinarias

¡Atención a los hábitos y otros causantes!

Pero ¿qué causa la repetición de las infecciones urinarias? Entre los principales motivos se encuentran:

• La forma de uretra femenina. Es uno de los factores más determinantes, y es que la uretra de la mujer tiene una longitud menor que la del hombre, por lo que es más sencillo que las bacterias u otros microorganismos entren a la vejiga a través de este conducto urinario.
• Las relaciones sexuales. Se incrementa el riesgo de sufrir infecciones de orina cuando existen varios cambios de parejas sexuales y se mantiene una vida sexual activa. Acerca de ello, nuestra uróloga nos aclara que "las relaciones sexuales son un elemento favorecedor de que se produzca una infección urinaria, y no por la propia actividad sexual en sí, sino porque el masaje uretral, favorecido en el coito, puede facilitar la ascensión de bacterias hasta la vejiga".
• Los cambios hormonales. Son característicos durante la menstruación, la gestación, el parto, el puerperio, la menopausia y el envejecimiento, y en cualquiera de esas etapas se puede originar una cistitis causada por la alteración en el pH de la vagina.
• La mala higiene íntima. No debe ser escasa, pero tampoco excesiva, ya que ambas acciones podrían contribuir al desarrollo de una infección de orina repetida debido a la alteración del pH, y lo mismo podría suceder con el uso de desodorantes, cremas y jabones vaginales. Además, después de defecar, es muy importante realizar una limpieza adecuada para evitar el acceso de bacterias.

Vacuna para la infección de orina

Es el tratamiento que se utiliza para prevenir las infecciones urinarias, como la cistitis, y, en caso de que se produzcan, disminuir la intensidad de sus síntomas. Así lo indica nuestra doctora: "El principal motivo para vacunarse contra la infección de orina es la prevención de nuevos episodios, especialmente en aquellas mujeres que sufren cuadros de repetición o recurrentes".

Aunque este tratamiento recibe el nombre de vacuna, no se inyecta el medicamento en el brazo como estamos acostumbrados a que sean este tipo de terapias, sino que se administra de manera más sencilla, colocando un líquido o un espray en el interior de la boca, debajo de la lengua.

En más detalle, nuestra doctora nos explica que "en España se utilizan las denominadas autovacunas, que son vacunas personalizadas que se extraen de la flora microbiana que está produciendo la infección de orina de cada paciente en ese momento". Por eso, para su elaboración se usan las bacterias, ya sean muertas o atenuadas, o productos procedentes de estas. Y esto se consigue mediante una muestra de orina que recoge el paciente en su casa con ayuda de un kit especialmente preparado para ello.

Al igual que en otras vacunas, el objetivo es estimular al organismo para que sea capaz de generar sus propias defensas frente a ciertas infecciones o enfermedades. Así, el sistema inmune puede reconocer los agentes infecciosos y eliminarlos para proteger al organismo de próximas infecciones. Esto, trasladado a las infecciones urinarias, consiste en que "la vacuna antibacteriana frente a la infección de orina genera y aumenta anticuerpos en las mucosas del organismo, entre ellas la genito-urinaria", según matiza nuestra doctora.

¿Es efectiva contra infecciones de orina de repetición?

Sí. De hecho, existen numerosos estudios sobre la vacunación contra las infecciones urinarias de repetición. Nuestra doctora apunta que, según se ha demostrado, "este tipo de vacuna reduce la frecuencia de episodios de infecciones de orina hasta en el 75% de las mujeres que la usan en los siguientes 18 meses tras su administración, disminuyendo la necesidad de tomar antibióticos y mejorando su calidad de vida".

No obstante, hay que tener en cuenta que no previene al 100% los episodios de infección de orina, por lo que puede aparecer alguno, aunque se desarrollaría con síntomas más leves, lo que supondría una mejora en su tolerancia.

Por otra parte, el único efecto adverso detectado es el mal sabor de boca, así que se puede aplicar el número de veces que sea necesario.

Recomendada en mujeres con infecciones recurrentes

Esta vacuna está aconsejada en los siguientes casos:

• Mujeres que han presentado tres o más episodios de cistitis durante el año, o que han tenido dos o más episodios de esta infección urinaria en los últimos seis meses, incluso aplicando las medidas preventivas de higiene, dieta, consumo de zumo de arándanos y uso de desinfectantes urinarios.
• Mujeres con alergia a los antibióticos que tienen una infección de orina de repetición.

En cualquier caso, nuestra uróloga nos comenta que "si tenemos infecciones urinarias de repetición y nos encontramos desanimadas porque no encontramos una solución, las vacunas frente a las cistitis pueden hacer que acabemos olvidándonos por un tiempo de la infección de orina".

Pasos para solicitar la vacunación

La muestra de orina se envía al laboratorio en un envase preparado para ello

1. Acudir al Urólogo. Si se presentan infecciones de orina de manera recurrente, lo más adecuado es contactar con la consulta de Urología, donde se confirmará si se reúnen los requisitos para este tipo de vacuna. Asimismo, se mostrará cómo solicitarla y administrarla cómodamente. Como profesional de esta especialidad, nuestra doctora nos cuenta que "toda la documentación (instrucciones de uso, tramitación de la vacuna, receta para el laboratorio y receta de la Seguridad Social), así como el material necesario, es proporcionado en la consulta del urólogo. Todo está perfectamente detallado y explicado para que el procedimiento sea fácil de cursar".
2. Recoger la muestra de orina en casa. Es un paso imprescindible para la elaboración de la autovacuna y se debe tomar esta muestra en el momento de la infección. Para ello se pueden utilizar los kits específicos para la recogida de muestras de orina.
3. Enviar la muestra al laboratorio. Se debe introducir adecuadamente en el envase y, después, dentro de un sobre para que la farmacia pueda remitirlo al laboratorio fabricante de la vacuna.
4. Recibir la vacuna para la infección urinaria en la farmacia. Cuando está disponible, el laboratorio la envía a la farmacia, que, por su parte, avisará al paciente para que vaya a buscar el tratamiento.
5. Administrar la vacuna contra la infección urinaria. Es muy fácil de administrar, tal como describe nuestra doctora: "El tratamiento es tan sencillo como aplicarse unas gotas o un espray (dos aplicaciones, una vez al día), debajo de la lengua, durante tres o cuatro meses".