Cómo tratar la diarrea veraniega

La diarrea y la gastroenteritis son enfermedades muy comunes en verano. Por eso, cuando sus molestos síntomas aparecen en el momento más inoportuno como las vacaciones, tratamos de aliviarlos lo antes posible y en ocasiones podemos caer en el error de recurrir al uso de bebidas isotónicas y otros falsos remedios caseros.

En este artículo te ofrecemos recomendaciones para el tratamiento de la diarrea, en especial en los más pequeños. ¡Conoce qué deben comer y beber!

Diarreas en verano: síntomas y causas

Esta enfermedad es muy frecuente en verano, por lo que es importante reconocer sus signos de alerta. La doctora Raquel Fernández Martínez, especialista en Pediatría y sus Áreas Específicas del Hospital Quirónsalud Bizkaia y el Centro Médico Quirónsalud Plaza Euskadi, apunta que "hablamos de diarrea cuando las deposiciones son blandas o líquidas, más abundantes y frecuentes de lo habitual".

Otros síntomas habituales son dolor en el abdomen, fiebre o vómitos. Aunque su duración puede variar, lo normal es que no se prolongue más que unos pocos días.

En cualquier caso, hay que prestar especial atención a los niños, que pueden presentar esta enfermedad durante las vacaciones. La pediatra señala que "la causa más frecuente de diarrea en la infancia son las infecciones víricas, aunque en ocasiones también hay diarreas producidas por bacterias o parásitos o por otras causas".

Cómo tratar la diarrea veraniega

Cuándo preocuparse por la diarrea infantil

La deshidratación es uno de los problemas más graves que puede ocasionar la diarrea en la infancia. Esto puede ocurrir cuando las deposiciones son demasiado abundantes, líquidas y frecuentes.

Por lo tanto, es esencial observar a los niños que están pasando por esta enfermedad. Al respecto, la doctora subraya que, "cuando notamos que están decaídos, tienen mucha sed, orinan menos, tienen la boca seca, lloran sin lágrimas o tienen los ojos hundidos, es señal de que están deshidratados". Ante estos síntomas, lo más recomendable es consultarlos con el especialista.

Igualmente, es recomendable acudir a Pediatría si notamos malestar general, que están demasiado sedientos o vomitan de forma repetida sin llegar a tolerar alimentos o apenas ingerir líquidos.

Qué pueden beber los niños con diarrea

Es importante rehidratarlos y recuperar los líquidos y electrolitos que se pierden a través de las heces. Pero para ello no se deben utilizar refrescos, zumos, bebidas isotónicas o sueros de preparación casera como la limonada alcalina, ya que no son adecuados para la diarrea.

En líneas generales, lo más adecuado para tratar la diarrea es dar líquidos al menor de forma frecuente, sobre todo después de las deposiciones diarreicas. En más detalle, la especialista nos explica que, "en casos leves, se puede tomar agua con frecuencia, que beba lo que quiera. Y, en casos más intensos, con deposiciones líquidas abundantes, se recomiendan las soluciones de rehidratación oral, lo que conocemos como suero oral de farmacia".

En cuanto a tomar antibióticos o medicamentos para frenar la diarrea, están desaconsejados. Sobre este punto, la doctora agrega que "en caso de fiebre se pueden tomar antitérmicos. Y, siempre con la supervisión de un especialista, valorar asociar probióticos, ya que algunos acortan la diarrea".

Si nuestro hijo está con diarrea, ¿qué debe comer?

No hace falta seguir dietas especiales, limitar demasiado la alimentación o permanecer en ayunas. La recomendación es que el menor coma y siga una nutrición adecuada.

No obstante, es lógico que pierda el apetito. Por esta razón, la doctora aclara que "podemos ofrecerle la alimentación que vaya tolerando, siempre sin forzar, evitando comidas grasas o con mucho azúcar"

Otra recomendación es que, si el menor vomita con facilidad, se puede empezar con suero oral en pequeñas cantidades cada 5 minutos, aumentando poco a poco la cantidad a medida que lo vaya tolerando. Cuando ya no vomite, podemos comenzar a ofrecerle algo de comida, mientras continuamos con el aporte de líquidos.