Sexo durante el embarazo, ¿es bueno o malo?

Si quieres seguir practicando sexo durante el embarazo, ¡puedes hacerlo! Las relaciones sexuales y el orgasmo provocan un efecto muy positivo durante esta etapa de la vida de la mujer. Además, no son perjudiciales para el feto, ya que la anatomía de la madre está preparada para protegerlo.

Hablamos sobre el sexo durante la gestación ¡sin tabús!

Relaciones sexuales durante el embarazo, ¿es bueno?

Probablemente hayas escuchado alguna de las hipótesis acerca de si es bueno o malo tener sexo durante la gestación. Ya te aclaramos que no solo es bueno, también proporciona numerosos beneficios. De hecho, según las últimas investigaciones, el sexo es totalmente seguro y no supone un riesgo para las embarazadas.

La doctora Isabel Rodriguez-Piñero y Elena de Iracheta Ruíz, ginecóloga y psicóloga respectivamente de la Unidad de la Mujer del Hospital Ruber Internacional, nos señalan que "durante el embarazo los músculos de la pelvis están más irrigados y hay más flujo sanguíneo, por lo que practicar sexo es bueno en esta situación".

Sí que existen ciertas excepciones en las que el sexo no está aconsejado, por ejemplo, en casos de rotura prematura de membrana, riesgo de aborto o de parto pretérmino, u otra enfermedad.

En definitiva, las relaciones sexuales son buenas durante el sexo siempre que no existan contraindicaciones por parte de los especialistas. Y, además, su efecto es muy positivo para la embarazada y el bebé.

Sexo durante el embarazo, ¿es bueno o malo?

Qué ocurre al practicar sexo durante el embarazo

De forma general, la actividad sexual tiene multitud de beneficios en la salud, desde fortalecer el suelo pélvico hasta estimular el colágeno de la piel. Pero ¿cuáles son sus beneficios para las embarazadas?

Sin duda, nuestras especialistas destacan el aumento de oxitocinas y su efecto en el bienestar mental. En concreto, Iracheta nos aclara que "practicar sexo ayuda a disminuir el estrés porque durante el orgasmo se libera oxitocina, que es la hormona del amor, de la empatía, de las relaciones sexuales. Liberar oxitocina es bueno para el bebé y para la mujer".

Igualmente, otros gestos de cariño pueden estimular esta hormona tan beneficiosa, tal como señala la psicóloga: "Las relaciones de pareja, los masajes, abrazos, caricias y besos, todo el contacto físico y afectivo, ayuda también a liberar oxitocina".

Por qué aparecen contracciones después de tener relaciones

Esto es una reacción normal que se desencadena por la liberación de oxitocina, por lo que no debe ser motivo de preocupación. Así lo indica la doctora Rodriguez-Piñero: "Es algo normal, fisiológico, no pasa nada, al menos que sean dolorosas y rítmicas".

También hay que tener en cuenta que el sexo es una actividad física, lo que puede motivar esta sensación de contracción, tal como añade la doctora: "Se producen porque el acto sexual es un ejercicio físico, y lo normal después de hacer ejercicio se tengan".

Por su parte, nuestra psicóloga nos tranquiliza todavía más al remarcarnos que "es, sencillamente, una respuesta muscular que suele durar un par de minutos, que es el tiempo que permanece la oxitocina en sangre".

Sexo durante las primeras semanas

¿No sientes deseo de practicar sexo durante el primer trimestre? Esto es normal. Precisamente, el 54% de las embarazadas no tienen apetito sexual durante el primer trimestre de embarazo, según los últimos estudios.

Pero ¿por qué ocurre esto? Iracheta nos explica que "está directamente relacionado con los síntomas físicos: en los primeros tres meses disminuye la libido si existen problemas como malestar, náuseas, vómitos, cansancio, etc. Evidentemente, si no nos encontramos bien se reduce el deseo hasta que el cuerpo se aclimata al embarazo".

Aumento del deseo sexual en el segundo trimestre

Como el embarazo está más estable, se suele notar un aumento del apetito sexual y de la libido. También se experimentan ciertos cambios en el cuerpo que hacen que la mujer se sienta más atractiva. La doctora Rodríguez-Piñero añade que "esta situación está motivada por el cambio físico en la mujer y el aumento de irrigación y flujo de riego sanguíneo en la pelvis, que hace que los orgasmos sean más intensos y la vida sexual más placentera".

Relaciones sexuales durante el tercer trimestre, ¿sí o no?

Sí, siempre que así lo desees. Eso sí, es posible que te encuentres más incómoda, y esto puede hacer que decaigan las relaciones sexuales. La psicóloga afirma que "pueden darse hasta el final del embarazo sin que supongan un desencadenante del parto".

En cualquier caso, es posible que tengas que buscar una postura confortable. "Se recomienda adaptar las posturas para estar cómodas y no presionar el abdomen", matiza Iracheta.

El sexo después del parto

Cada mujer vive el posparto de forma distinta, porque en algunos casos se encuentran muy bien en menos de un mes, mientras que en otros se necesita más tiempo. Al respecto, la psicóloga nos explica que "cada mujer necesita una adaptación porque cada situación es diferente; además, en ese momento la madre está volcada en su bebé, en su cuidado y alimentación, y se tiene el ámbito del placer cubierto gracias a la liberación de oxitocina que se produce también cuando se está en contacto con el bebé".

Por otro lado, es normal que disminuya el deseo sexual durante este periodo de adaptación y también a causa de la lactancia. Sobre esto último, la doctora Rodríguez-Piñero añade que "durante el puerperio y si la madre está dando lactancia materna, hay una supresión fisiológica de las hormonas por la prolactina, porque la naturaleza es sabia y quiere evitar nuevos embarazos. La prolactina inhibe las hormonas sexuales y hay una disminución absoluta de la libido, así como una sequedad vaginal fisiológica".

En caso de sentir dolor durante las relaciones sexuales, lo más conveniente es acudir a consulta. "Si se nota dolor, se debe consultar al ginecólogo o a un fisioterapeuta de suelo pélvico, así como al psicólogo o sexólogo, porque muchas veces las molestias tienen su origen psicológico y se solucionan en tan solo dos o tres sesiones de psicoterapia", aconseja Iracheta. En ello insiste la doctora, añadiendo que es importante evitar que los dolores vaginales se cronifiquen.