Cómo recuperar la silueta tras el parto con cirugía estética
Operaciones más demandadas después del embarazo para mejorar el aspecto del abdomen y el pecho
Después del embarazo, lucir una silueta atractiva parece una tarea casi imposible. Y es que algunos de sus efectos en el cuerpo no se pueden eliminar con los métodos tradicionales de alimentación saludable y deporte, aunque sí es posible conseguirlo mediante cirugía estética.
El doctor Julio Murillo Zardoya, especialista de Cirugía Plástica, Estética y Reparadora del Hospital Quirónsalud Vitoria, nos señala que "el objetivo principal de estas cirugías es que la mujer se reconozca a sí misma, se encuentre bien consigo misma, y que sienta que ‘vuelve a ser ella’".
Te contamos cuáles son las operaciones más demandadas después del parto, cuándo se pueden realizar y qué ocurre en caso de plantearse un nuevo embarazo a posteriori.
Abdominoplastia tras el parto: para qué sirve
Se trata de la cirugía estética por excelencia para moldear el vientre y eliminar cualquier imperfección, como las estrías, la flacidez, los cúmulos de grasa y la distensión abdominal. La doctora María Jesús García-Dihinx, especialista en Cirugía Plástica, Reparadora y Estética del Hospital de Día Quirónsalud Zaragoza, nos destaca que "por norma general, las mujeres después del embarazo son las que se someten a este tipo de cirugía".
En concreto, la abdominoplastia es una intervención quirúrgica centrada en el área abdominal que permite trabajar la piel, la grasa y la recolocación de los músculos. Esto último ayuda a tratar la distensión del abdomen, que provoca una continua inflamación en el vientre. El doctor Murillo describe este problema como "si la musculatura del abdomen se partiera en dos y se ‘desprendiera’ una mitad para cada lado".
Generalmente, su duración es de 2 a 5 horas y se utiliza anestesia general.
Cuándo se aconseja realizar la abdominoplastia
Aunque el tiempo puede variar dependiendo del tratamiento estético, lo más conveniente es esperar 12 meses después del parto, aproximadamente. También hay que tener en cuenta otras indicaciones antes de esta operación:
- No fumar
- Hidratar la piel correctamente
- Evitar la toma de fármacos y alimentos que afectan a la coagulación sanguínea
- Mantener un peso saludable después de la operación durante los siguientes seis meses
- Acudir a los especialistas para analizar el caso y descartar otras enfermedades
Mastopexia y mamoplastia tras el embarazo
La forma, el volumen y la elevación de las mamas pueden cambiar a consecuencia del embarazo y la lactancia, debido a los cambios repetitivos que se originan en su tamaño y que también repercuten en la calidad de la piel.
Afortunadamente, existen la mastopexia y la mamoplastia, dos cirugías estéticas ampliamente utilizadas para proporcionar un aspecto voluminoso y juvenil al pecho. Aunque ambas técnicas se usan con propósitos distintos, se pueden combinar para complementar sus efectos. Te contamos en qué consisten:
- Mamoplastia u operación de aumento de pecho. Se utiliza para ganar volumen en los senos, usando para ello prótesis o grasa propia, dependiendo de cada caso individual.
- Mastopexia o cirugía para la elevación de las mamas. La caída de los pechos es una de las posibles consecuencias del embarazo, pero por suerte esto se puede tratar mediante la mastopexia, que es la técnica más recomendada para moldear el pecho tras el parto. Al respecto, la doctora Dihinx puntualiza que "es la solución técnica adecuada para aquellas mujeres que, tras el embarazo, no están contentas con el aspecto de sus pechos, ya sea porque se han vaciado, caído, o ambas cosas a la vez".
- Combinación de cirugías mamarias. En ocasiones, es necesario combinar el aumento de mamas y la mastopexia para moldear el pecho, a la vez que se aporta un mayor volumen, consiguiendo un busto atractivo y juvenil.
Por último, el doctor Murillo nos indica que "el objetivo es que el pecho vuelva a ser como antes del embarazo o, incluso, en ocasiones, conseguir que se sienta más satisfecha de lo que lo estaba".
Cuándo se puede operar el pecho
Es recomendable que hayan trascurrido entre 6 y 12 meses desde que se interrumpió la lactancia. No obstante, es importante contar con la valoración de los especialistas para conocer el momento idóneo para este cambio estético.
Cabe recordar que durante el postoperatorio no deben realizarse esfuerzos excesivos, ni levantar objetos pesados, por lo que es importante tener ayuda para el cuidado de los hijos mientras nos recuperamos de la cirugía de mamas.
Cirugía estética, ¿antes o después del embarazo?
Tras el embarazo se pueden realizar las operaciones estéticas que se deseen sin que interfieran en la posibilidad de tener otro hijo, siguiendo siempre las indicaciones de los especialistas. Eso sí, el doctor Murillo nos avisa que, con frecuencia, vuelven a aparecer los mismos problemas tras el segundo embarazo, lo que requeriría pasar de nuevo por el quirófano para recuperar la figura deseada. Así pues, aunque médicamente hablando no haya ningún inconveniente en operarse entre dos embarazos, para que los efectos de la cirugía sean duraderos y la figura deseada se mantenga, quizá lo más razonable sea dejar este tipo de operaciones para cuando se esté segura de que no se quieren tener más hijos.
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